Cuando hace unos días noté que la hembra lifalili tenía marcas de mordiscos sobre la boca, pensé que había sido peleando con el macho. Pero hoy me di cuenta que esta observación es no es correcta. Hoy pude observar como otra de las hembras lifalili retaba a la hembra que cuida los huevos y como ambas forcejeaban mientras se mordían en la boca. La hembra que cuida los huevos ganó el forcejeo ya que obviamente es la que tiene la mayor motivación pero la otra presento una resistencia fuerte. Como dicen en mi pueblo estas hembras pelearon “a lo macho”. El macho nado alrededor de las hembras en un estado de gran excitación pero no intervino hasta que una de ellas huyo. Cuando la hembra perdedora huyo, el macho la persiguió aunque solo por un corto trecho.
La hembra que cuida los huevos ha perdido una cantidad de peso significativa desde el día del desove. Apenas come y se mantiene en un estado de alerta constante que la hace perseguir a todos los peces que se acercan al lugar donde están los alevines. Se nota ya claramente flaca comparada con los otros peces. He tratado de ofrecerle comida pero la hembra, apenas nota la cercanía de otro pez, deja de comer y se va a perseguirlo. Los alevines están en buena condición y por su incesante movimiento, han consumido una buena parte de los nutrientes del saco vitelino. Ya se les puede ver claramente los ojos y algo de pigmentación en el cuerpo.
En la foto en que la hembra y el macho están juntos intimidando otra hembra pueden notar que el macho tiene muchas líneas de escamas de un color azul claro. Tengo la impresión de que las otras hembras están tratando de seducir al macho. Por lo menos una de ellas parece que quisiera expulsar a la hembra de la cavidad donde están los alevines para ella poder usarla para desovar. Esta hembra se ve gorda y tiene excelente coloración, me pregunto si podrá convencer al macho de que abandone a su pareja y desove con ella.
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